En esta entrada vamos a describir una ruta de MTB invernal por Pozuelo y con mucho frío.
Los que vivimos en Madrid capital (o cerca) tenemos la suerte de contar con parques forestales (Casa de Campo) o montes (como El Pardo) lo suficientemente cerca como para poder estar rodando en «plena naturaleza» en pocos minutos, ya sea desplazándonos en coche, en transporte público o en la propia bici. Eso no es decir poco, los que vivimos entre asfalto apreciamos estas posibilidades.
Los suegros del primo viven en Pozuelo
El pasado sábado, víspera de Reyes, el día amaneció soleado pero frío y el primo Christian y un servidor decidimos empezar el año dando pedales por uno de estos parajes: los montes entre Pozuelo de Alarcón, Majadahonda y Boadilla del monte.
Comenzamos rodando por las calles de Pozuelo
La ruta propuesta por Christian no es complicada desde ningún punto de vista. Solo tiene una rampa dura en el Monte de Boadilla a lo largo de los 30 kilómetros que recorrimos en sentido antohorario. Justo lo que pedía el cuerpo tras los excesos navideños y la falta de actividad ciclista. Los primeros 2,5 kilómetros los recorremos por el casco urbano. Un poco rollo, como siempre que nos toca callejear, pero siendo domingo no había nada de tráfico.
Pasando por encima de la M40 entramos en el Monte del Pilar, un precioso pinar con caminos acotados por vallas delimitadoras de fincas privadas.
Salimos al monte
Los caminos presentan algunos bancos de arena que a los que comenzamos en esto del ciclismo de montaña hace años con las 26″ nos da gusto superar con las ruedas de 29″. Menuda diferencia.
Algún tramo de sendero nos dio un poco de vidilla. Siempre sin demasiada pendiente ni dificultad técnica. Lo justo para dejarse llevar durante unos pocos metros.
Ratitos entretenidos
En nuestro camino hacia el monte de Boadilla nos cruzamos con un rebaño de ovejas con borrico y todo… pero no quiso pararse a charlar con nosotros el pollino.
Lo rural
Un burro y un pollino
El Monte de Boadilla es posiblemente la zona que propone porcentajes más agresivos de toda la ruta. Es el paraje con el que más familiarizado estoy ya que he rodado un par de veces por aquí. En todo momento nos cruzamos con caminantes y con ciclistas, el día invitaba a ello. Y poco a poco recorremos los kilómetros que nos separan de nuestro destino en Pozuelo de Alarcón, punto de salida de la ruta.
Monte de Boadilla
Como digo, una ruta muy agradable para cuando a uno le apetece rodar sin demasiadas pretensiones con la ventaja respecto a la Casa de Campo de que circularemos por caminos mucho menos transitados. 100% recomendable también como ruta de iniciación y para realizar en cualquier época salvo tal vez el verano, que hará mucho calor y el campo estará seco y feo.