Jesús ha cambiado de bici recientemente y por motivos de espacio necesita deshacerse de la que estaba usando hasta ahora: una excelente Trek Fuel EX 8. Pero para venderla hay que hacerle mantenimiento, que algunas cosillas no estaban funcionando como deberían. En esta entrada explicamos cómo arreglar unos frenos de disco.
La maneta del freno trasero, un Avid Elixir 5, se quedaba atascada como podéis ver en el siguiente vídeo:
No retornaba a su posición inicial. Cada vez que se usaba era necesario volver a ponerla en su sitio de forma manual con el engorro que eso suponía.
Investigando sobre el problema enseguida encontré este vídeo en el que se explica que estos frenos solían fallar de esta manera y que Avid en su día puso a disposición de los clientes un kit de servicio para solucionarlo. Pero antes de gastar 25€ he preferido desmontar y limpiar a ver si eso soluciona el problema. De manera que he seguido los pasos (perfectamente explicados) del vídeo que he mencionado y al que os referencio pero como he ido sacando fotos voy a documentar el proceso para aquellos de vosotros que prefiráis ver fotos en vez de estar pausando el vídeo continuamente después de cada paso.
En primer lugar veamos qué herramientas y materiales necesitaremos.
- Líquido de frenos DOT-4
- Juego de llaves allen
- Kit de purgado para Avid
- Destornillador phillips pequeño
- Llave fija del 8 o llave inglesa
- Papel o trapos
- Grasa, que no está en la foto
- Talento, que no se puede fotografiar
- Paciencia, que hay algún paso que se las trae
- Alicate seeger, de esos que acaban en puntas.
Lo primero que haremos, por precaución, es quitar las pastillas de la pinza para no contaminarlas con el aceite que saldrá del circuito.
En este modelo de freno van sujetas con un tornillo que sacamos con su correspondiente llave allen.
Tras sacar las pastillas y ponerlas a salvo de salpicaduras nos fijamos en un tornillo de cabeza phillips que hay en el regulador de distancia de la maneta.
Lo sacamos sin dificultad con el correspondiente destornillador. Ojo con perderlo que es pequeño.
Habiendo sacado este tornillo podemos sacar el «principal», por la parte interior de la maneta del freno. Se trata de un tornillo allen.
Mide unos 4 centímetros y tiene un hueco por el que pasa el tornillito que hemos quitado antes. Así es fácil entender que al girar la rueda que regula el «reach» lo que hacemos en realidad es girar este tornillo.
Con este tornillo fuera podemos sacar también el muelle y la rueda del «reach».
Así es a fin de cuentas cómo van montadas estas piezas que hemos ido desmontando:
El siguiente paso es desmontar el pasador que une la leva con el cuerpo de la maneta. Yo me ayudo de una llave allen mediana. Hay que hacer algo de presión pero se consigue de manera más o menos sencilla.
Sacamos la leva y vemos el pistón que presiona sobre la bomba del hidráulico.
Para facilitar los siguientes pasos desmontamos el latiguillo de la maneta con una llave plana.
Tenemos que desmontar la bomba. Atención ahora que viene la parte delicada. Si nos fijamos en el interior vemos entre la suciedad un circlip o anillo seeger de pláscico. Como no tengo a mano los alicates adecuados para sacarlo me ayudo de un par de llaves allen de 2 mm y de mucha paciencia y algo de talento.
Consigo sacar el cuerpo de la bomba con su muelle y todo. Este muelle es el responsable de que la leva de freno vuelva a su sitio.
Vemos en el interior de la maneta la ranura en la que iba alojado el circlip.
Es el momento de limpiar todo bien. a simple vista parece que la bomba y su muelle están operativos.
Así es como opera el freno hidráulico: la leva acciona el émbolo que presiona la bomba que empuja el aceite por el circuito hasta la pinza, que acciona los pistones con las pastillas contra el disco.
Una vez que todo está razonablemente limpio vamos a montarlo de nuevo siguiendo el procedimiento inverso pero aplicando grasa a las partes móviles para darle suavidad al asunto.
Voy comprobando en cada paso que la leva retorna bien. Sin montar la rueda de ajuste de «reach» y su correspondiente muelle todo funciona perfectamente:
Me acojono cuando coloco la rueda y el muelle en su sitio porque la maneta se vuelve a quedar atascada!
¿Sería este el problema desde el principio? dando una vueltita a la rueda de «reach» consigo que la leva opere con normalidad.
Vamos a cambiar el aceite de los frenos, que le va a venir bien. Para ello compré un kit para frenos Avid que me ha sorprendido por lo mucho que simplifica la tarea.
Lo primero que hago es montar las jeringas. Coloco el latiguillo con las roscas correspondientes para que no se salga nada de aceite de frenos.
El otro extremo irá enroscado en pinza y maneta, así que les coloco los terminales correspondientes.
Ya tengo las jeringas listas y cargadas de líquido de freno DOT-4. Las pinzas rojas sirven para estrangular el latiguillo.
Me ayudo de una llave plana para empujar el pistón hacia el interior antes de proceder al sangrado.
Abro el tornillo de purgado de la maneta con la ayuda de una herramienta con punta torx 5 que el propio kit proporciona.
Hago lo mismo en la pinza.
A tomar por culo el chándal. Al romperse el vacío del circuito se sale todo el aceite viejo por la maneta… que reposaba sobre mi pierna. No importa, era viejo.
Enrosco una jeringa en la maneta y la otra en la pinza. Este es el estado de la jeringa de la pinza:
Presiono el émbolo de la jeringa de la maneta veo que en la jeringa de la pinza comienzan a aparecer burbujas de aire y algo de suciedad:
Coloco ambas jeringas en vertical por eso de que las burbujas suban hacia arriba y comienzo a intercambiar el contenido de una y otra a través del circuito teniendo precaución de no llegar a la zona sin líquido de las jeringas para no meter aire.
Cuando veo que no siguen saliendo burbujas me doy por satisfecho y con cuidado de no verter líquido ni de vaciar el circuito desenrosco las conexiones de las jeringas con pinza y maneta y coloco los tapones.
El trabajo está hecho. Solo queda montar de nuevo el freno en la bici y comprobar el resultado.
¡Funciona!
Coste de la reparación: 16€ del kit de purgado, porque el líquido de frenos lo tenía por casa de la moto.
Sin duda esta puesta a punto devuelve mucho valor a la bici… pero hay que seguir haciéndole cosas.
Por supuesto compartiremos con vosotros, queridos lectores apasionados de la mecánica, las distintas operaciones que vayamos haciendo.